Introspección, liberación mental y un universo propio. En esta línea se sitúan las ilustraciones de Paula Weinberg, artista y diseñadora que se acaba de abrir camino a la exploración de las posibilidades que esconde el arte gráfico.
Saber analizar, aceptar y explotar lo que te ocurre dentro es para Weinberg la fuente principal de inspiración para sus ilustraciones. Plasmar esto sobre el papel es su principal reto creativo.
Ideas tomadas del mundo del cine, de la música o la literatura, comportan otro pilar de inspiración para el imaginario de Weinberg y le sirven de detonante creativo a la hora de contar algo. Aunque abriendo nuevos registros, principalmente utiliza el cuerpo y rostro femenino como “campo de batalla” para desarrollar esas historias y conflictos internos.
El haber vivido en Tokio y aprender de la cultura japonesa han concedido al contenido de su ilustración el reto de buscar lo inusual en las cosas cotidianas. Expresar, con pocos elementos, ideas potentes que lleguen directamente a la mente del que observa. Siempre jugando con un lenguaje indirecto que comunica más de lo que aparenta.